EN PUEBLA...El arte de gobernar garrote en mano

Todo apunta a que la Procuraduría de Justicia y el Poder Judicial Estatal se han convertido en los garrotes políticos del morenovallismo.

Primero fue la acción en contra del OFS y ayer la detención del secretario particular de Ana Teresa Aranda.

En el primer caso, la detención del camión que trasladaba documentos oficiales no se deriva de ninguna averiguación previa, ni se trató de un acto en flagrancia, ya que los expedientes que se trasladaban estaban en custodia del propio OFS.

En pocas palabras, los famosos expedientes nunca salieron de la esfera de dominio del Órgano Fiscalizador, lo cual convierte a las detenciones de los funcionarios en violaciones a los derechos y las garantías de estos empleados. La acción simplemente no resiste un análisis.

En el segundo caso, el de la detención del exalcalde de Palmar de Bravo, todo apunta a que la Procuraduría de Justicia se ha convertido en una especie de brazo ejecutor al servicio de los intereses del gobierno estatal.

Pero vayamos por partes.

Para dar contexto a la hipótesis del garrote político se deben retomar cinco hechos.

1. Al inicio de la semana pasada, Ana Tere presenta formal denuncia por haber recibido amenazas de muerte, y deja entrever la posible injerencia del gobernador Moreno Valle.

2. La mañana del domingo, al arribar la camioneta de la “Doña” a la asamblea estatal del PAN, tres vehículos la interceptan y detienen a su secretario particular, Pedro Barojas, quien manejaba la unidad.

3. El responsable del operativo por parte de la Policía Ministerial, reconoció que no portaban la orden de aprehensión, lo cual es una violación flagrante en contra del inculpado.

4. Al arribar el gobernador a la asamblea panista, Ana Tere lo increpó sobre la detención de su colaborador, a lo que Moreno Valle respondió diciendo que sí había orden de aprehensión por peculado.

5. Cuatro horas después, la PJE emitió un boletín mediante el cual explican que sí existe una orden de aprehensión en contra de Pedro Barojas, y que ésta fue librada desde el mes de enero.

Tras estos puntos, es inevitable pensar que se trató de un acto intimidatorio en contra de Ana Tere.

El punto medular de esta afirmación es el contenido del boletín de la PJE, ya que afirman que la orden de aprehensión está vigente desde el mes de enero.

Si partimos de la base de que Pedro Barojas jamás actuó como prófugo de la justicia, y que despachaba abiertamente en Palmar de Bravo como líder municipal del PAN, se presume que la Procuraduría no quiso ejecutarla y que guardó esa orden judicial en un escritorio hasta que el todopoderoso ordenó que se desempolvara y se cumpliera.

¿Cómo puede explicar la PJE que no hayan podido detener a Pedro Barojas a lo largo de nueve meses? ¿Acaso están confesando su ineficiencia?

Literalmente, el detenido se ha paseado por todo Puebla como “Pedro por su casa”, incluso estuvo presente en eventos presidido por Moreno Valle.

Detenerlo era más fácil que quitarle un dulce a un niño.

¿Por qué lo aprehendieron hasta ahora? ¿Por qué cinco días después de la denuncia de Ana Tere? ¿Por qué en la puerta de la asamblea panista?

La respuesta es muy simple. Esta acción tiene todos los rasgos de los garrotes políticos utilizados en los viejos tiempos del autoritarismo priista. Aquel de la famosa dictadura perfecta.

Como buenos herederos del viejo régimen, los morenovallistas salieron corregidos y aumentados.



¿Y dónde diablos están los panistas?

Si la detención de un consejero estatal blanquiazul se concretó minutos antes de la asamblea del PAN, cualquiera pensaría que los consejeros azules se unirían para levantar la voz. Sobre todo porque quien presidió ese acto fue el gobernador Moreno Valle.

Pues sorpréndanse, nadie —salvo Ana Tere— se atrevió a abrir la boca.

La cobardía y el entreguismo son parte esencial de las características del nuevo PAN.

Hoy los panistas tienen el partido y el gobernador que merecen.

¡Para eso me gustaban!

FUENTE:

http://www.intoleranciadiario.com/detalleOpinion.php?d=649